Femer: el despacho de pieles marinas

En La Teste-de-Buch, en la cuenca de Arcachon, una pareja de madre e hija, unidas por una gran complicidad, ha desarrollado un curtido ecológico de pieles de pescado destinadas a la fabricación de accesorios de marroquinería, calzado, objetos decorativos o moda.

Femer - le comptoir des peaux marines

Marielle es una empresaria treintañera y dinámica de Nueva Aquitania. Tras concluir brillantemente sus estudios y hacer un máster en Derecho ambiental y otro en Gestión del litoral y del mar, no conseguía encontrar un trabajo que la llenara. Fue entonces cuando Monique, su madre, le habla de un desfile de moda en Laponia donde las modelos vestían trajes realizados con pieles de pescado.

Madre e hija, muy unidas entre sí y con el mar, inician un proceso de análisis, investigación y formación. Por fin, en 2013, nace «Femer».

Femer - les peaux marines

Todo comienza con la obtención de las pieles, suministradas por las pescaderías una vez retirada la parte comestible. En lugar de terminar en la basura, Marielle les da una «2ª vida». Se pueden utilizar todos los peces, de agua dulce o salada, salvo la merluza que tiene la piel demasiado fina.
Como cada piel es diferente y posee su propia textura, precisa un tratamiento especial.

Marielle prefiere las pieles de peces capturados a escala local, como la lubina, el esturión o el lenguado. Todo el trabajo se lleva a cabo manualmente, sin utilizar productos químicos.

Con ayuda de su madre, desarrolló un curtido vegetal a base de corteza de mimosa de la vecina Duna de Pyla; para dar color a las pieles, emplean pigmentos naturales producidos en Francia.

En total, se tarda un mes en realizar el proceso de curtido, secado, suavizado y teñido de la piel, incluyendo acabados como la aplicación de purpurina dorada en determinadas pieles.

Este proceso produce una piel inodora, resistente incluso al agua e hipoalergénica. Las pieles se venden por Internet, pero Marielle no se ha conformado con eso. Ha iniciado unas relaciones de colaboración

Femer - collection

Como ya sabéis, soy fan de todo lo «made in NA». Por tanto, no debe sorprenderos que os diga que me encantan las sandalias tipo «pylataise» para bebé de Paskap, fabricadas en Labrit, en Las Landas, un regalo de nacimiento perfecto. Para mí, elijo las sandalias tipo «pylataise» de piel de salmón y ovino en carbono/plata, elegantes y más originales que la «tropézienne» :_)

En cualquier caso, mi más sincera enhorabuena a esta pareja de madre e hija llena de recursos. Esperamos con impaciencia que las «pieles Femer» conquisten la Fashion Week.

Información: www.femer.fr

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